Algo pasa con Carrefour

Sep 6 • Actualidad • 10968 Views • 13 comentarios en Algo pasa con Carrefour

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En un post anterior ya comenté que una de las causas que propició la aparición del sector servicios a gran escala (donde, por razones de economía, incluyo a minoristas y mayoristas) fue la subvención al transporte vista desde el punto de vista del consumidor: los menores costes de desplazamiento hicieron posible trasladar los comercios al extrarradio, ampliándolos. Hoy parece que, incluso con carreteras públicas, las grandes superficies están teniendo problemas para atraer a los clientes hasta sus grandes centros:

Con familias menos numerosas y una creciente ansia de conveniencia, los consumidores están menos dispuestos a manejar hasta los grandes hipermercados que se encuentran fuera de la ciudad para abastecerse de alimentos.

Un artículo del Wall Street Journal menciona que este factor, junto con la aparición de otros competidores especializados o más baratos, está minando los beneficios de Carrefour –el primer minorista europeo y segundo del mundo. ¿Cuál ha sido su reacción? Aparte de una campaña publicitaria y de reducción de precios agresiva, Carrefour opta por trasladar sus hipermercados a locales más reducidos y abastecerse de productos de ámbito más local. Adiós a las economías de escala.

Conforme el ámbito de la empresa gala se reduce cada vez más a la alimentación, y conforme otros competidores comienzan a obtener resultados en ese terreno, podemos esperar que el mercado en general se descentralice –aunque las empresas que tomen su parte del pastel sean así mismo grandes corporaciones. ¿Hasta qué punto Carrefour no ha sido un gigante con pies de barro, protegido por enormes barreras de entrada?

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13 Responses to Algo pasa con Carrefour

  1. Victor L. dice:

    Corrijo: Carrefour todavía no ha hecho eso, pero tiene intención de hacerlo. Al parecer, los CEOs anteriores ya propusieron planes parecidos y no los llevaron a la práctica, habrá que ver cómo acaba todo esto.

  2. Kunster dice:

    He leído el post anterior y el de Mises vs. Borsodi.
    ¿Es que las grandes superficies deberían construir sus propias carreteras? Y las empresas mayoristas, ¿deberían construir sus propios puertos, aeropuertos y redes ferroviarias? Lo veo problemático, ya que, en mi opinión, el trazado de estas estructuras de transporte debe tener algún tipo de coordinación a nivel regional.
    Por ejemplo, sería absurdo construir dos carreteras paralelas entre A y B, y esperar que compitan por el precio. Un uso mucho más eficiente y racional de los recursos sería construir una única carretera (independientemente de que sea pública o de pago). La misma idea se puede aplicar a los puertos aeropuertos, redes ferroviarias, etc.
    Incluso si aceptamos que estas estructuras de transporte deben ser de pago, su construcción debe estar controlada de alguna manera por alguna institución local, como podría ser una asociación vecinal o municipal.

  3. Victor L. dice:

    Kunster, no se trata de que construyan sus propias carreteras sino de que asuman el coste de pasar por ellas. En este aspecto, el hecho de que se construyan bajo control vecinal o mediante compañías es indiferente.

    Personalmente tiendo a pensar que las carreteras principales serían gestionadas por empresas, mientras las carreteras regionales podrían estar a cargo de mutualidades u organizaciones parecidas.

    Un ejemplo de competencia en medios de transporte son los ferrocarriles americanos del s. XIX, que sin las concesiones de tierras gubernamentales probablemente no hubiese degenerado en la política -aun y todo inestable- de cárteles.

    Un saludo.

  4. Kunster dice:

    Entiendo. Pero ello significa que quien realmente asumirá el coste no será la empresa, sino el consumidor que se dirija allí, ¿no?

    Coincido en que «las carreteras principales serían gestionadas por empresas, mientras las carreteras regionales podrían estar a cargo de mutualidades». Pero sopecho que las carreteras privadas pueden tender a situaciones de monopolio y cobrar precios abusivos (por ejemplo, por ser la única vía de transporte en coche de tal a cual ciudad). Y, como he dicho antes, la posibilidad de construir otras tantas carreteras privadas por el mismo camino me parece absurda.

  5. Victor L. dice:

    Kunster, con «asumir el coste» me refiero a que paguen por el transporte de sus mercancías, no a que construyan ellos mismos las infraestructuras.

    Respecto al posible monopolio, ten en cuenta que tendrían que competir con otros medios de transporte (el tren, el avión, la bici, etc.) y con otros usos que los consumidores pudiesen dar a ese dinero. El monopolio, en ese sentido, solo es peligroso si la demanda es inelástica por encima del precio competitivo, en cuyo caso los propietarios de la carretera pueden asignar un precio de monopolio. De lo contrario, cualquier aumento de precio reducirá la demanda y perderán dinero.

    (Aun así, en términos absolutos tiendo a pensar que serían más baratas que las carreteras estatales, solo que el coste actual corre a cargo de impuestos y no de tarifas de usuario).

    Un saludo.

  6. kasen dice:

    De lo k me estoy dando cuenta es k un mercado 100% libre es imposible, bueno no es imposible, pero seria negativo. Se necesitan muchas regulaciones para k los cosumidores no salgan perjudicados y para k no se comercie con cualuier cosa k de beneficio pero sea mala. Por ejemplo los alimentos, deben pasar controles para ver si son saludables. Aunk esta regulacion no la debe llevar a cabo el estado.

  7. snake dice:

    kasen, si Victor vendiese productos en bueno estado y yo en mal estado. ¿Cuánto cree que yo tardaría en cerrar xq la clientela preferiría acudir al establecimiento de Victor? Como puede ver, el propio mercado ha solucionado el problema.

    Por otro lado, una cosa es que no exsta un sistema de leyes centralizado, y otro bien distinto que el derecho consuetudinario permita envenenar a las personas.

    Saludos

  8. kasen dice:

    No me refiero a k esten en un estado del cual el consumidor se de cuenta de k estan mal, el vendedor no es tonto y sabe k tiene k dar productos k parezcan buenos pero k igual no lo son, y esto lo ara simplemente x abaratar costes.me refiero a establecimientos tipo mcdonalds k no sabes ni lo k te metene en la comida, en la alimentacion se pueden hacer muxas cosas de mala calidad pero k son mas baratas k las de calidad optima y el consumidor k ni se entere. Yo creo k este tipo de regulaciones las deberian llevar acabo asociaciones de consumidores.

  9. snake dice:

    Basicamente es lo mismo. Si surge otra hamburguesería de precio y calidad similar a mcdonalds, pero que explica detalladamente el origen de sus productos, ¿a cuál hiría usted?

  10. kasen dice:

    Pero haber hay muchas formas de engañar a los consumidores, ademas con el espiritu de cosumidor k hay en España donde no nos esforzamos por cambiar cosas aunk sean injustas me parece k perfectamente unos cuantos productores pueden acordar juntos cosas, o simplemente uno solo puede engañar. Piensa en lo de las hamburgesas, yo iría a la hamburguesería k explicara el origen de la carne debido a k previamente ya me he enterado de k las hamburguesas suelen tener cosas malas, si no ni me importaria. Estoy convencido de k son necesarias federaciones de consumidores k controlen esas cosas, ademas en un libre mercado radical con la ley dl maximo beneficio a los minimos costes como unica ley puede llevar a muchas cosas negativas, monopolios (mas dificiles debido a la supresion de patentes) o organizaciones empresariales jerarquizadas y asalariadas ya k dan mas beneficio.

  11. Victor L. dice:

    Kasen, no entiendo muy bien dónde radica tu objeción. Como dice Snake, los productos dañinos son rápidamente apartados del mercado, sin mencionar que cualquier perjuicio contra el consumidor habría de verse en los tribunales, no quedaría impune.

    Las organizaciones de consumidores, a menos que controlen toda la cadena de producción, es difícil que puedan controlar estrictamente los mínimos higiénicos que ellos consideren, y si lo consiguieran probablemente el coste de hacerlo fuese mayor que los beneficios que obtiene el consumidor.

    Por otra parte, maximizar el beneficio también significa que los empresarios pueden abstenerse -y de hecho lo hacen- de prácticas abusivas que a corto plazo les reportan ingresos, pero que a largo plazo minarían su reputación. Se me ocurre el caso de cualquier empresa de correo electrónico; podrían quedarse con tu dinero, o mandarte los pedidos defectuosos, pero saben que les interesa satisfacerte para que vuelvas a comprar.

    Respecto a los monopolios, me parece muy difícil que surjan en un contexto completamente libre -como tú dices, las patentes lo pondrían muy difícil; pero toma en cuenta también las barreras de entrada, las economías de escala artificialmente aumentadas, etc.- Ciertamente habrá trabajo asalariado, pero probablemente no sea la norma, y mucho menos en empresas muy jerarquizadas.

    De hecho, las normas higiénicas como las que mencionas suelen ser usadas por las corporaciones para desplazar a los pequeños productores.

    Un saludo.

  12. Kunster dice:

    No se como hemos acabado hablando de hamburguesas, pero bueno… 😛

    Lo que dice Kasen no es ninguna tontería. El consumidor puede valorar la calidad de un producto y compararla con la de otros similares. Pero, por ejemplo, ¿Cómo puede saber que los alimentos que compra no tienen aditivos cancerígenos? ¿Cómo sabe que han sido manipulados con la debida higiene? ¿Cómo sabe que los aparatos electrónicos que usa no tienen una obsolencia programada? Como estos se me pueden ocurrir muchos ejemplos.

    Se supone que a largo plazo el mercado lo arreglará, pero para entonces el daño ya estará hecho.
    Además yo, que en general soy un defensor del libre mercado, también reconozco sus fallos. Por desgracia, no todo funciona como en teoría, y siempre habrá alguien que logre aprovecharse del consumidor en situaciones anómalas.

    Creo que es posible compatibilizar los controles de calidad con el libre mercado. Pueden existir federaciones de consumidores que inspeccionen a las empresas y expendan algún tipo de certificado de que siguen las medidad adecuadas de higiene, salud, seguridad etc. Todo ello, por supuesto, previa petición de la empresa. Si los consumidores son suficientemente inteligentes evitarán los productos que no tengan dicho certificado.
    Esto no se diferencia de lo que hacen actualmente empresas como Applus+ (que, por cierto, certifica a McDonalds).
    Por otro lado, con ello surgen otros problemas: se pueden falsificar los certificados o sobornar a los inspectores, y aquellas personas que por sus ingresos se vean obligadas a comprar productos más baratos pero sin certificado de calidad quedan desprotegidas.

    Victor, ¿que clase de tribunales hay en una sociedad anarquista?

    Saludos.

  13. snake dice:

    Muy simple: surgirán empresas que emitan certificados de calidad. Los productos que tengan los mejores certificados serán los más populares. Las empresas de emisión de certificados con mejor fama serán las más populares. el libre mercado ha aportado la solución.

    «Por otro lado, con ello surgen otros problemas: se pueden falsificar los certificados o sobornar a los inspectores, y aquellas personas que por sus ingresos se vean obligadas a comprar productos más baratos pero sin certificado de calidad quedan desprotegidas.»

    Exactamente igual que ahora.

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